El masaje es sin duda la forma más económica, sencilla y efectiva de cuidar el cuero cabelludo y, de paso, acelerar el crecimiento de nuestro pelo. Para realizar el masaje, no necesitamos ninguna herramienta o preparación especial además de nuestras propias manos.
¿Cómo realizar el masaje de forma correcta?
La regularidad es lo más importante. Si queremos ver resultados, debemos realizar el masaje todos los días, preferiblemente durante 5-10 minutos. Recordemos siempre hacerlo con las manos limpias, y posiblemente tener las uñas cortas.
También es importante el sentido en el que lo hacemos: debemos masajear correctamente desde la frente hasta el cuello, siguiendo la dirección de los músculos en nuestra cabeza. El masaje debe ser suave y delicado, utilizando solo las yemas de los dedos y nunca las uñas, ya que podríamos dañar el cuero cabelludo y en lugar de mejorar la circulación y estimular el crecimiento del cabello, podríamos irritarlo.
Comenzamos el masaje en la línea del cabello en la frente. Colocamos las manos, aplicamos una ligera presión y masajeamos con movimientos circulares, desplazándonos gradualmente hacia la nuca.
¿Cúando es el mejor momento para realizarlo?
El momento más conveniente para realizar este masaje es durante el lavado del cabello, como lo hacen los peluqueros. De esta manera, evitaremos problemas de exceso de grasa en el cabello después del masaje, que, es importante saberlo, acelera la producción de sebo y lo distribuye por el cabello. Esto es especialmente importante para personas cuyo cabello tiende a engrasarse rápidamente.
También podemos hacer el masaje antes del lavado o, si tenemos el cuero cabelludo seco y necesita hidratación adicional (para esto, nuestro sebo natural es ideal), podemos hacerlo después de lavarnos el cabello o en días en que no lo lavamos.
¿Para qué masajear?
El masaje estimula la circulación en los vasos sanguíneos y oxigena las raíces del cabello, lo que principalmente nos ayuda a estimular el crecimiento capilar.
Además, nos ayuda a nutrir el cuero cabelludo y a eliminar la piel muerta y el cabello que caerá pronto y que obstruye los folículos capilares, impidiendo el crecimiento de un nuevo cabello.
Gracias al masaje, también podemos fortalecer nuestro cabello, ya que activamos los folículos inactivos. Además, el masaje del cuero cabelludo tiene un efecto relajante, alivia las tensiones, ayuda a liberar el estrés y sabemos que este último es una de las principales causas de la caída del cabello.
¿Y qué hay de las herramientas?
El masaje más efectivo y seguro de realiza con las manos. Al usar herramientas, es más fácil ejercer demasiada presión y irritar el cuero cabelludo, y eso, por supuesto, no es lo que queremos.
Sin embargo, si no sabemos realizar el masaje correctamente con las manos, podemos usar herramientas adecuadas, como un cepillo de pelo de cerdas de jabalí, un cepillo Tangle Teezer o un masajeador especial.
En este caso, debemos ser más cuidadosos y asegurarnos siempre de que los utensilios que usamos estén perfectamente limpios.
¿Quién no debe realizar un masaje del cuero cabelludo?
Entre las contraindicaciones más comunes para el masaje del cuero cabelludo se encuentran:
- Hiperactividad de las glándulas sebáceas: Si hay una producción excesiva de sebo en el cuero cabelludo, el masaje podría estimular aún más la producción de grasa y agravar el problema de cabello graso.
- Inflamaciones en el cuero cabelludo: Si el cuero cabelludo está inflamado debido a dermatitis u otras afecciones cutáneas, el masaje podría empeorar la irritación y causar molestias.
- Foliculitis: Esta es una inflamación de los folículos pilosos que puede resultar en pequeñas protuberancias rojas y dolorosas en el cuero cabelludo. El masaje podría irritar aún más los folículos inflamados y aumentar la incomodidad.
- Pediculosis: Comúnmente conocida como infestación de piojos, esta condición requiere un tratamiento específico para eliminar los parásitos. El masaje podría propagar los piojos a otras áreas del cuero cabelludo o el cabello.
- Psoriasis: La psoriasis es una enfermedad crónica de la piel que causa parches rojos, escamosos y con picazón. El masaje puede agravar la psoriasis y desencadenar brotes de la afección.